Sabemos de sobra que una buena alimentación es fundamental para nuestra salud. Lo que quizá no sepamos es qué significa exactamente, qué alimentos tienen los nutrientes que necesita nuestro organismo para que estemos sanos. Gracias a la ciencia, cada día sabemos más, pero debemos huir de las informaciones falsas que prometen resultados milagrosos.
Muchas enfermedades crónicas están relacionadas con la alimentación. Una de las más evidentes es la obesidad: una epidemia en el mundo occidental y, curiosamente, en países con tradición de dieta mediterránea. Los cambios en la sociedad y el sedentarismo afectan, y es necesario tomar medidas desde los primeros meses de vida.
Lo que comemos es más importante de lo que parece. La ciencia se propone mejorar los alimentos que tomamos para que cumplan funciones específicas.
En nuestra mano está adquirir y transmitir hábitos saludables siguiendo siempre el consejo de los expertos.